Con la aparición del modelado de información de edificios, más conocida como metodología BIM, los campos de la Ingeniería Civil y la Construcción están experimentando un nuevo paradigma. De hecho, podemos decir que este sistema ha transformado los procesos de diseño, gestión y edificación.
Como venimos diciendo en post anteriores, contar con un único modelo de información desde el que trabajan todos los agentes supone un abanico de beneficios a corto y largo plazo. Sin embargo, también cabe preguntarse por los retornos de la inversión.
Aquí es donde el ROI (Return On Investment, por sus siglas en inglés) juega un papel importante. Se trata de un valor económico que permite medir el rendimiento obtenido de la implementación de distintas acciones.
Concretamente, para determinar las ganancias obtenidas es necesario utilizar la siguiente fórmula:
ROI = (beneficio obtenido – inversión) / inversión.
Y si además la empresa aplica la metodología BIM, calcular la eficiencia de los gastos y la toma de decisiones tecnológicas resulta más sencillo al aunar los diferentes procesos.
A continuación te mostramos las ventajas que supone la metodología BIM, según datos recogidos por Autodesk, a la hora de mejorar ese retorno de la inversión:
La metodología BIM proporciona beneficios tangibles y cuantificables, así como otras ventajas intangibles en el nivel del proyecto. Eso sí, se requiere una gran inversión tecnológica para su implantación. No obstante, la parte positiva es que solo se requiere ese desembolso a la hora de desarrollar el cambio estratégico del negocio que supone la adaptación BIM.
La adopción de BIM otorga una madurez profesional que prepara a las empresas para trabajar en la ejecución integrada y un nuevo modelo de riesgo para controlar mejor los costes y tiempos. Por otra parte, todo ello agiliza las aprobaciones y autorizaciones oficiales.
La optimización de la ejecución de los proyectos supone una disminución de reclamaciones y litigios. Y todo gracias al uso eficiente de los recursos que, a su vez, permite el cumplimiento de los timings.
Por otro lado, a nivel de la empresa cabe destacar que los ingresos netos por honorarios pueden ser más altos con BIM. Y es que no solo mejoran los flujos de trabajo, sino también la capacidad para el trabajo en equipo. En cuanto al personal, otro beneficio radica en la cualificación y la retención de trabajadores.
Las oportunidades para trabajar con nuevos clientes se incrementan a medida que las empresas se adaptan a la metodología BIM. Ofrecer servicios permanentes es más sencillo gracias a la integración transparente de la información de los proyectos.
No cabe duda de que el ROI es el factor determinante para decidirse a adoptar la metodología BIM. ¿A qué esperas para dar el paso y sumarte a su implantación? No dudes en informarte de los distintos planes de formación a medida para empresas que pone a tu disposición Pharos Structuralia y… ¡súmate al BIM!