Con la temporada invernal llegan las nevadas y sus problemáticas consecuencias para las infraestructuras y redes de transporte. Las administraciones locales ponen en marcha las actuaciones necesarias tanto para prevenir que la nieve se acumule como para asegurar el óptimo funcionamiento y los mínimos contratiempos en las carreteras, el transporte aéreo y ferroviario.
En carreteras es importante mantener la limpieza y evitar la formación de hielo, por lo que de manera preventiva se distribuyen esparcidos fundentes de sal y salmuera. Las máquinas más habituales para quitar la nieve son las turbo fresadoras y las quitanieves con remolque. Las primeras lanzan la nieve lejos de la vía transitable mediante una turbina. La nieve es disgregada previamente con una fresadora antes de su evacuación. Son las más adecuadas para acumulaciones de nieve superiores al metro de altura. Las quitanieves con remolque llevan un remolque con cuchilla de arado en el frente y capacidad de desplazarse hacia un lado, permitiendo la limpieza de dos carriles a la vez. De esta manera se reduce a la mitad el combustible, el tiempo y el número de operarios necesarios.
Para las infraestructuras ferroviarias se utilizan principalmente dos tipos: las máquinas quitanieves con cuña y las de cabeza rotatoria. Se basan en el mismo principio que la limpieza de carreteras; mientras la primera actúa como una pala y desplaza la nieve por su forma, la segunda lanza la nieve a gran distancia gracias a las cuchillas giratorias montadas en el frente de la locomotora. Otro método utilizado para remover la nieve de las vías son los camiones biviales que pueden circular tanto por carretera como por vías férreas. Utilizan máquinas de soplado de aire caliente que derrite y despeja la nieve al mismo tiempo. Su uso no está tan extendido ya que consumen más combustible.
En aeropuertos se ponen en marcha los planes de actuación frente a contingencias de hielo y nieve que incluyen trabajos preventivos de seguimiento de las condiciones climáticas y estudio constante del estado de las pistas. Las infraestructuras aeroportuarias cuentan con verdaderas tropas de tractores para retirada de hielo y nieve y vehículos esparcidores de fundentes. Entre ellos destacan los medidores de coeficiente de rozamiento, camiones con cuchilla, esparcidores de fundente líquido y barredoras de cuchilla y soplado.