La UIA, Unión Internacional de Arquitectos, organizó un concurso de ideas para la construcción de una torre emblemática para Kuala Lumpur, diez años después de que se erigieran las Torres Petronas. El despacho de arquitectura BIG, con sede en Copenhague y Nueva York, diseñó una propuesta innovadora y sugerente que dialoga con el perfil de la ciudad y se propone compartir protagonismo con las icónicas gemelas de Cesar Pelli.
La gran originalidad de la propuesta se basa en su diseño formal: un rascacielos invertido. La típica tectónica de la torre que va disminuyendo la superficie de planta a medida que gana altura se altera completamente y propone un edificio formado por cuatro volúmenes apilados: torre esbelta, prisma rectangular, cubo y bloque perimetral. En los encuentros entre ellos se ubican plantas públicas con zonas verdes y de esparcimiento que ofrecen magníficas vistas de la ciudad. La coronación aloja un hotel y zona de ocio con un jardín central a cielo abierto.
El edificio, con una superficie total de 200.000 metros cuadrados, se encuentra envuelto en una doble piel que, evocando la arquitectura tradicional, permite una adecuada ventilación y control de la insolación.
La decisión de invertir la morfología se debe a múltiples motivos. El propio emplazamiento tiene una superficie reducida, tanto en el suelo como verticalmente, al hallarse rodeado de torres ya existentes. Sin suponer un mayor esfuerzo estructural, ya que el escalonamiento es gradual y se resuelve con simples voladizos, aumentar los metros cuadrados construidos a medida que se gana altura la despega de sus vecinos, reduce la radiación solar, ofrece sombra a las plantas públicas en altura a la manera de los espacios vernaculares malayos, y conduce a un mayor aprovechamiento de las vistas y a un sugerente dialogo conceptual con las omnipresentes Petronas.