El problema que supone los altos niveles de contaminación en las grandes urbes está cada vez más presente. Es por ello que las administraciones están tomando medidas dirigidas a disminuir la emisión de partículas contaminantes.
En este sentido, si hablamos de contaminación en la ciudad, uno de los factores que más aportan a ello es el tráfico de vehículos. La enorme cantidad de desplazamientos que se realizan todos los días en una metrópoli influye enormemente en la calidad del aire que respiramos.
Por tanto, se deben tomar las medidas necesarias para fomentar el uso de sistemas de transporte alternativos respetuosos con el medio ambiente. Estas acciones es lo que se entiende por movilidad sostenible y existen muchas opciones para implementarlo.
La movilidad sostenible por el mundo
La necesidad de las grandes ciudades de reducir la contaminación y mejorar el aire que respiran sus ciudadanos ha hecho que se creen planes de actuación a favor de la movilidad sostenible. A continuación os mostramos alguno de los que se están desarrollando:
1. Amsterdam
Amsterdam lleva muchos años apostando por los desplazamientos en bicicleta. Actualmente cerca del 60% de los trayectos en la ciudad se realizan en este medio de transporte, y para que esto sea posible disponen de más de 400 kilómetros de carriles exclusivos para ciclistas.
Asimismo, el programa Aire Limpio 2025 tiene por objetivo eliminar las emisiones de CO2 vinculadas al transporte de vehículos. Para llevarlo a cabo, se están tomando medidas como la sustitución de autobuses por modelos cero emisiones, la renovación de la flota de taxis o la restricción de coches contaminantes a determinadas zonas.
También se promoverá el uso de vehículos eléctricos mediante ayudas, deducciones fiscales y con la colocación de 4.000 puntos de recarga eléctrica por la ciudad.
2. Copenhague
Tal y como sucede con la capital de Los Países Bajos, Copenhague es un espejo al que mirarse en lo que a movilidad sostenible se refiere. Se estima que cada día sus habitantes recorren más de un millón de kilómetros en bicicleta. La red de carril bici supera los 350 kilómetros y las infraestructuras están adaptadas y son seguras.
Además, quiere ser la primera ciudad Carbono Neutral, lo que significa que toda la energía utilizada se produce o es compensada con sistemas renovables. Para alcanzar este hito, se quieren utilizar vehículos públicos que no emitan CO2, incrementar en un 20% el número de pasajeros en el transporte público o conseguir que la mitad de los desplazamientos sean en bicicleta.
3. Hong Kong
Al ser una de las urbes con mayor densidad de población del mundo, el transporte tiene un peso muy importante en Hong Kong. Por ello, desde hace unos años el Gobierno ha estado tomando medidas para reducir la contaminación y hacer la ciudad más respetuosa con el medio ambiente.
Se han peatonalizado calles, han aumentado las opciones de transporte público, especialmente el ferroviario y se ha mejorado la accesibilidad. Además, se ha fomentado la compra y utilización de vehículos eléctricos suspendiendo el impuesto de matriculación.
4. Ciudad de México
Desde hace unos años la Ciudad de México está tomando todas las medidas necesarias para dejar de ser una de las urbes con más congestión de tráfico y con mayor contaminación.
La presentación de los planes ProAire han conseguido en los últimos tiempos que se reduzcan de manera significativa sus niveles de contaminación y de emisiones de CO2. Esto se ha logrado con el cierre de fábricas, la prohibición de usar coches un día por semana dentro del área metropolitana, la utilización de autobuses de tránsito rápido o la peatonalización de numerosas calles en el centro.
Además, la Ciudad de México se ha comprometió junto a París y Atenas a la prohibición de la circulación de los vehículos diésel a partir del año 2025.
5. Seúl
La capital surcoreana tiene casi diez millones de habitantes y se estima que pasan una hora y media moviéndose en transporte público al día. Debido a esto, es necesario tomar medidas para mejorar la movilidad en la ciudad.
La renovación del autobús urbano realizada en la década anterior ha conseguido disminuir en un 35% las emisiones de dióxido de carbono, un 20% las de NO2 y un 40% las partículas contaminantes.
En la actualidad, un plan con el objetivo en el año 2030, prevé doblar las áreas peatonales de la ciudad, incorporar un red de bicicletas gratuitas y evitar los desplazamientos innecesarios. Además, cuenta con un sistema de información y datos en tiempo real que ayuda a controlar el correcto funcionamiento del transporte público.
En definitiva, el futuro pasa por el respeto al medio ambiente y por ello cada vez serán más los planes de transporte respetuosos con el entorno que aparezcan en las ciudades. No te quedes atrás y especialízate en movilidad urbana sostenible con alguno de los cursos existentes.