El proyecto NANOLEAP es una iniciativa de la Unión Europea cuyo principal objetivo es la creación de una red de plantas piloto para la investigación y el desarrollo de nanomateriales que puedan ser utilizados por el sector de la construcción.
¿A qué nos referimos cuando hablamos de nanomateriales? A materiales cuya estructura molecular ha sido modificada de manera tal que las partículas que los componen son entre 100 y 1000 veces más pequeñas de lo normal. Cuando un material es reducido a ese tamaño, su comportamiento cambia y puede adquirir propiedades nuevas y sumamente ventajosas: resistencia, durabilidad, aislamiento, conductividad, ligereza o transparencia, entre otros.
Algunos de los nanoaditivos más utilizados en materiales de construcción son los nanotubos de carbono y las nanopartículas de plata, cobre, óxido de hierro y dióxido de titanio o silicio.
Entre los principales beneficios que pueden ofrecer a un material encontramos: aumento en la resistencia del hormigón y el acero, mejora en las propiedades térmicas, acústicas, hidrófugas e ignífugas, optimización de la eficiencia energética de materiales fotovoltaicos, prevención de corrosión y grietas, capacidad para repeler el agua, las bacterias y las partículas de polvo o suciedad, e incluso la facultad para auto-repararse, auto-limpiarse o diagnosticar posibles fallos estructurales.
Con 7 millones de euros de presupuesto y de la mano de universidades, centros de investigación y empresas alemanas, españolas, italianas y suizas, este emprendimiento inaugura una verdadera revolución en la tecnología de los materiales para la construcción y promete aportar al sector enormes ventajas técnicas, estructurales, medioambientales y económicas.