La información As Built, sean planos o sea un modelo BIM deben reflejar la realidad de la obra, ya que son indispensables para la gestión de un edificio.
Un proyecto de construcción, y sobre todo una obra, son procesos muy volátiles y cambiantes. Por lo que, en plena ejecución suelen surgir modificaciones sobre lo planificado y, sea por razones de logística, técnicas o económicas, deben quedar reflejados en los planos de dicho proyecto. Al plano que refleja todas estas modificaciones se le conoce como plano As-built.
La planimetría de una construcción es un documento muy importante, no solo para la construcción y la obra, sino que, en este caso, también es el documento que refleja de manera gráfica cómo está construido el edificio, y debe ser completamente fiel a la realidad. Así como debe estar claramente representada la información, ser de fácil lectura y precisa, para facilitar verificaciones legales, e incluso futuras modificaciones o trabajos de mantenimiento.
La definición técnica de los planos As Built, claramente refleja que se trata de un conjunto de documentos que incluyen planimetría, cálculos y descripciones de las actuaciones necesarias para adaptar el proyecto inicial a lo que realmente se ha construido. Por ende, es una documentación cuya responsabilidad recae únicamente sobre el constructor de la obra, pero en algunos casos se subcontrata a terceros para asumir dicha carga de trabajo durante el desarrollo de la obra.
Plano “RedLine”. RedLineCim.com
Se trata de los dibujos planimétricos técnicos que sean necesarios (plantas, alzados, secciones, o detalles) para evidenciar de manera clara los cambios suscitados en obra con respecto al proyecto originario. Se suele utilizar la metodología conocida como “Red Line”, donde se resalta con una línea roja superpuesta sobre los planos originales las modificaciones ejecutadas.
Es toda aquella información que no puede ser reflejada en planos, concentra de manera escrita, y en parte gráfica, la descripción detallada de los trabajos realizados para llevar a cabo dichas modificaciones. También incluye fichas técnicas, tipos de acabados, e incluso, los cálculos necesarios en cualquier oficio que así lo requiera.
No debemos olvidarnos de que la tecnología BIM se ha ganado un lugar importante en la documentación que requiere un proyecto de principio a fin. En gran parte de los países del mundo, si no lo es ya, en cuestión de poco tiempo estará contemplado en la legislación sobre la construcción, por lo que, un modelo BIM As Built seguramente pasará a ser un requisito indispensable para entregar al promotor una vez terminada la obra.
Si partimos de la base de que en el futuro cercano el modelo BIM será un entregable indispensable (actualizado con la información As Built), la posterior gestión del edificio recurrirá a dicho modelo para la operatividad del activo. Pero el BIM nos permite ir un paso más allá con los AIM (Active Information Model), o Modelo de información de los Activos; que concentra toda la información del modelo As Built acompañada por documentación, base de datos, referencias cruzadas, que sirven como una base sólida para la puesta en marcha de la gestión de un activo, como lo es el edificio.
En resumen, la información As Built casi forma más parte de la organización para la gestión, operatividad o explotación de lo que será el edificio; y por esto, se convierte en un entregable cuya correcta ejecución y su total reflejo de la realidad de la obra es imprescindible para cerrar un proyecto. Si la información mostrada en los planos o el modelo “As Built” no es correcta puede dificultar la gestión del edificio, el mantenimiento y las futuras reformas o modificaciones.