El Tower Bridge de la ciudad de Londres, en Inglaterra, es un puente levadizo que cruza el Río Támesis, cerca de la Torre de Londres que le da nombre. Este puente es uno de los símbolos más representativos de esta ciudad inglesa.
El Tower Bridge, también conocido como Puente de La torre, fue construido para facilitar la movilidad de la población dentro de la ciudad de Londres. Además, el crecimiento económico del momento también impulsó su construcción.
Este puente tiene una longitud de 244 metros y dos torres de 65 m de altura. La distancia entre ambas torres es de unos 61 m, aproximadamente, y se divide en dos levas que pueden elevarse un ángulo de 83 grados, lo que permite que el tráfico del río no quede interrumpido. El gálibo de navegación es de unos 43 metros.
Este puente levadizo se activaba con un mecanismo hidráulico bombeado por máquinas de vapor, ofreciendo la posibilidad de que el tráfico de barcos por el río Támesis no quedase interrumpido. Actualmente, las máquinas de vapor han sido sustituidas por motores eléctricos.
La construcción, que tuvo una duración de 8 años, terminó en el año 1894, y contó con la colaboración de más de 400 trabajadores.
Se estima que el puente se abre al tráfico fluvial unas 1.000 veces al año. El puente se ha convertido en un autentico icono de la ciudad, siendo visitado por miles de turistas.