El futuro de la arquitectura podría encontrarse en un material natural como el bambú, existiendo ya una propuesta de ciudad realizada con este material amigable con el medio ambiente, y que además presenta más ventajas.
Las ciudades construidas con este material ecológico podrían proporcionar una solución sostenible al aumento de población que experimentan muchos países, como por ejemplo China.
Esta ciudad de bambú podría albergar a unos 200.000 habitantes, aunque en un principio sólo podrán disfrutarlo unas 20 familias. El proyecto se irá expandiendo en función del crecimiento de la población.
Este proyecto podría estar disponible en un futuro próximo, ya que se ha planteado para el año 2023. Los arquitectos del estudio Penda han sido los encargados de desarrollar el proyecto, asegurando que la arquitectura debe replantearse los métodos constructivos convencionales.
Este material ya ha demostrado en proyectos anteriores todas sus ventajas. Su rápido crecimiento, por ejemplo, que hace que este material sea económicamente muy competitivo, o ser fuerte, flexible y ligero, lo que es especialmente interesante para zonas donde exista el riesgo de terremotos.
Además en la parte interior del bambú se forman cámaras de aire, haciendo que este material también actúe bien como aislante, del ruido, del frio y del calor.