El contrato de los nuevos trenes de AVE consiste en la adquisición de 30 nuevos trenes y en la renovación de otros 10 de la actual flota de Renfe, incluyendo el mantenimiento por un periodo de 30 años, ampliable otros 10. El coste total del contrato asciende a un máximo de 2.642 millones de euros.
De estos 30 trenes, 15 cuentan con una rodadura que sólo les permite circular por vías de alta velocidad, mientras que los 15 restantes disponen de una rodadura desplazable, lo cual les concede la posibilidad de circular tanto por vías de alta velocidad como por tramos en los que existe ancho de vía convencional.
De estos 30 trenes, 15 son opcionales, es decir, el contrato contempla que la operadora irá solicitando, en lotes de 5 trenes, dependiendo de sus necesidades. Estas unidades adicionales podrán ser pedidas hasta el año 2020.
Una de las ventajas que ofrecen estos nuevos trenes es el aumento de la capacidad, ya que actualmente es de 350 a 390 plazas por tren, y en estos nuevos se exigirá que el número mínimo de plazas sea de 400. Los nuevos trenes podrán circular a velocidades de 320 kilómetros por hora.
Se estima que el número de pasajeros que viajan en AVE anualmente podría duplicarse en 5 años, en el 2020, siendo la cifra actual de unos 30 millones cada año. Renfe cuenta con poder disponer de las primeras unidades para el año 2018.
El importe del contrato asciende a un máximo de 2.642 millones de euros, que se reducirá a 1.096 millones si finalmente Renfe sólo adquiere los 15 primeros trenes.