Todo sobre el muro de Milán en un proceso constructivo

Muro de Milán: características, usos y ventajas

El muro de Milán en un proceso constructivo puede aportar múltiples ventajas. Esta pared especial de hormigón es muy útil para iniciar estructuras con niveles subterráneos, como puede ser por ejemplo un metro o un estacionamiento por debajo del nivel de suelo. A continuación, repasaremos cuáles son sus características técnicas, usos, ventajas y los materiales que se emplean en ellos.

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¿Qué es el muro de Milán?

El muro de Milán o el sistema de muro pantalla es un tipo de estructura lineal que se emplea en perforaciones profundas y se utilizan como muro de construcción. Las paredes de estas estructuras se fabrican a partir de varillas corrugadas y lisas que serán las responsables de sostener las cargas verticales y/u horizontales. Los muros diafragma, como también se les conoce, sirven como tabique de apuntalamiento al comienzo, pero después se convierten en uno de los muros del sótano. 

Por regla general, el muro de Milán es ideal para construcciones en el nivel subterráneo y, por tanto, se suele emplear en el metro, en los garajes, en el centro comercial, además de otras utilidades que veremos más adelante. Estas estructuras se construyen a partir de una zanja a medida y se rellena con hormigón en la mayoría de los casos, o con el material que sea más adecuado, según cada caso. Los muros diafragma se dividen en:

• Según su finalidad: puntales, sellado o de construcción.

• Según la tecnología empleada: monolítico o prefabricado.

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¿Cuándo utilizar muros Milán?

Si tenemos que hacer una excavación donde debamos contener las paredes circundantes a la vez que extraemos grandes volúmenes de tierra, como sucede en las cimentaciones, este elemento estructural nos será de gran ayuda. Otra de sus funciones es servir como elemento principal para sostener temporalmente zanjas longitudinales abiertas en la masa del suelo. 

Su uso principal, por tanto, es apoyar a las cimentaciones o contener cortes verticales en cualquier tipo de excavación subterránea. Gracias a esta utilidad, se utiliza mucho en construcciones civiles con sótanos, presas, muros de contención, muelles, sótanos o túneles y carreteras. Destacamos que se usa profusamente en obras situadas en medio de las ciudades.

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Características técnicas de los muros Milán

Para terminar de conocer qué son los muros de Milán, es imprescindible conocer todas las características técnicas que los define:

• Sus paredes se construyen con hormigón, en longitudes que pueden ir desde los 2,5 a los 7 metros. Su espesor tiene un baremo de 50 a 150 centímetros.

• Podremos excavar a más de 50 metros. 

• Es fundamental la sencillez del proceso. Primero abriremos una zanja profunda y estrecha en el suelo y, posteriormente, la dejaremos preparada para colocar encima la construcción que tenemos pensado realizar.

• Este procedimiento es silencioso, y no representa molestias para los vecinos de la zona donde decidamos situarlo. 

Materiales empleados

Los muros Milán son de cemento, y este se puede moldear in situ o adquirirse prefabricado. Las paredes de esta estructura se confeccionan con varillas corrugadas y lisas, que serán las responsables de sostener las cargas verticales y/u horizontales. En el caso de que los muros tengan unas proporciones demasiado grandes, deberemos reforzar el cemento con barras de acero.

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Las ventajas de los muros Milán

Este proceso estructural forma parte del contenido impartido en los másteres de arquitectura y edificación que ofrecemos en Structuralia. No obstante, te detallamos las ventajas más destacadas de este elemento, que debe ser tenido en cuenta a la hora de realizar cualquier proyecto. 

• Gracias al uso de lodos bentónicos, se crea una estabilidad en las paredes de las excavaciones óptima. Por tanto, no tendremos que utilizar entibaciones. 

• La excavación se realiza por módulos desde la misma superficie del terreno.

• El proceso de hormigonado se realiza de una sola vez. 

• La descompresión del terreno es mínima, sin importar al nivel de la compactación, debido a que no necesitaremos excavar y rellenar el trasdós del muro. Así se disminuye la presión residual que suele generarse en los rellenos. 

• Los espesores de las paredes son pequeños, lo que nos facilitará el aprovechamiento del volumen total del terreno. 

• Aunque exista un nivel freático alto, podremos construir pantallas en diferentes tipos de terreno. 

• Gracias al empotramiento del muro, no tendremos que realizar zapatas de cimentación.

• Si queremos construir muros inclinados, podremos hacerlo perfectamente. 

El rendimiento de la excavación suele tener un baremo de 30 a 50 metros cuadrados por día. Este dato está calculado en base a terrenos con arenas cementadas ligeramente y espesores de 45 centímetros; en caso de que estas medidas sean mayores el rendimiento también aumentará, gracias a la amplitud del peso de la cuchara. 

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Como podemos apreciar, el muro Milán en un proceso constructivo servirá para dar soporte a las zanjas o estabilizar excavaciones profundas a la hora de construir cimentaciones. En Structuralia ponemos a disposición de los profesionales del sector todos los conocimientos necesarios a este respecto para desarrollar tu carrera profesional. ¡Echa un vistazo a nuestra oferta formativa!