El CIM es el próximo paso en el sector manufacturero, te contamos sus beneficios y su complejidad.
¿Qué es el CIM? Y cómo está mejorando el sector productivo
Cada día el mercado exige ritmos de producción más arduos y estándares de calidad más altos, por lo que el sector de la manufactura se ha visto obligado a buscar nuevos métodos de producción que le permitan a las empresas ser competitivas. Uno de estos métodos es el CIM, las siglas en inglés para Manufactura Integrada por Computadora, que ya está siendo utilizado por grandes empresas en todo el mundo como Siemens, Autodesk, Dassault Systèmes, etc; y aquí te explicamos todo lo que necesitas saber sobre el CIM.
¿Qué es CIM?
Esta metodología de trabajo gira en torno a la integración de la tecnología con los procesos tradicionales de producción, sin limitarse al mero proceso productivo. Es decir, se trata de monitorear y obtener información en tiempo real sobre cualquier etapa o proceso productivo, desde el inicio, hasta el almacenaje, y la posterior distribución; esto se logra mediante la utilización de varios tipos de sensores y la gestión de grandes cantidades de información o Big Data.
A modo de resumen, podemos decir que el CIM engloba:
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Manufactura de prototipos
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Determinación de métodos eficientes para la producción, a través del cálculo de rentabilidad basados en el análisis de los procesos, volumen de producción, almacenaje y distribución.
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Control de pedidos a nivel de evitar desperdicios
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Producción asistida por ordenador y por control numérico.
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Control detallado de calidad en cada una de las etapas del proceso de producción.
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Ensamblaje asistido con robots.
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Revisión y control automatizado del almacenamiento
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Distribución automatizada de los productos, y control de la logística.
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Control automatizado de la facturación y reposición de stock adaptado a la demanda.
implementación de robots cooperativos en líneas de producción. theforestnext.com
Beneficios del CIM
Este nivel de automatización en los procesos de producción, trae importantes mejoras a todo el sistema, con el objetivo de hacer más eficiente todos los procesos y aumentar la calidad de los productos. Entre otros, estos son los beneficios más destacados del CIM:
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Mayor precisión: automatizar y monitorizar la producción a través del CIM, permite dar más atención a los pequeños detalles del proceso de producción, o incluso, poder agudizar el control de calidad sobre cada producto.
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Mayor aprovechamiento del tiempo: un sistema completamente automatizado, permite estar monitorizando y produciendo 24/7, y solo acudir a la atención del personal cuando hay algún fallo o anomalía.
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Automatización de procesos: un sistema integrado CIM permite la automatización completa de tareas monótonas y repetitivas, permitiendo al personal enfocarse en lo realmente importante.
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Reducción de costos: A pesar de que requiere una importante inversión inicial, un sistema automatizado y monitoreado CIM, es mucho más eficiente en tiempos, reduce la necesidad de personal, y produce información valiosa para mejorar cada parte del proceso; por lo que es más productiva a un menor coste.