Publicado originalmente el 27 de junio de 2022, actualizado el 24 de marzo de 2023
Las partes de un andamio le dan su versatilidad y los convierten en parte fundamental de una obra.
Ingeniería Civil y Transporte
24-mar-2023
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Structuralia Blog
Publicado originalmente el 27 de junio de 2022, actualizado el 24 de marzo de 2023
Las partes de un andamio le dan su versatilidad y los convierten en parte fundamental de una obra.
Los andamios llevan siendo parte fundamental e intrínseca de la construcción desde tiempos inmemoriales. Estas estructuras temporales se han usado para distintos fines a lo largo de la historia, como la construcción de edificios y monumentos, el trabajo a gran altura y la realización de reparaciones complejas.
Hoy en día, son una herramienta fundamental e incluso una obligatoriedad en las obras de gran tamaño. Para entender por qué, en este artículo daremos un repaso a la función y a las partes de un andamio. ¡No te lo pierdas!
Explicado de forma sencilla, un andamio es una estructura temporal, usualmente construida de acero o aluminio, que se utiliza para sostener a los trabajadores y su equipo en una posición elevada durante la construcción, mantenimiento o reparación de edificios, puentes y otras estructuras.
Los andamios están diseñados para proporcionar una plataforma estable y segura para que los trabajadores realicen su trabajo a diferentes alturas, y pueden estar compuestos por diferentes elementos, como plataformas, barras horizontales, diagonales, verticales, escaleras y ruedas para su movilidad.
Estas estructuras se construyen de acuerdo a las regulaciones y normas de seguridad establecidas, y su montaje y uso requiere de habilidades y formación especializada para garantizar la seguridad de los trabajadores.
Una de las claves de los andamios es su modularidad, es decir, se componen de piezas que sirven cómo módulos replicables que les permiten adoptar de una manera sencilla, la altura o la superficie necesaria en la obra. Además, un buen sistema de andamiaje cuenta con una variedad de partes o accesorios casi infinitas, que le permiten ser aún más versátiles y seguros, como por ejemplo, ruedas con frenos, trampillas, o incluso accesorios de automatización.
Aunque las partes de un andamio, por lo general, siempre sean muy similares y se repitan en las distintas estructuras provisionales que se elaboran con ellos, podemos categorizar los distintos tipos de andamios según su funcionalidad:
Andamios de trabajo: son aquellos que se utilizan en el día a día de las obras de construcción, deben ser seguros y prever el constante movimiento y las tareas de trabajo que realizan los trabajadores.
Andamios de seguridad: Son utilizados para proteger ciertos pasos o zonas concretas dentro de una obra, estos permiten el paso por debajo y protegen a los transeúntes de la caída de objetos.
Fuente: fimeca.es/
Andamio de servicio: son andamios que sirven al traslado de material dentro de la obra pueden ser pasarelas, escaleras o tobas de desescombrado.
Andamio de uso público: son estructuras desmontables que se instalan en las afueras, o en las obras que interfieren con la vía pública, para permitir la circulación de transeúntes o vehículos.
Andamios de apuntalamiento: son aquellos que se construyen de manera provisional para mantener en su sitio algún elemento estructural de la obra.
Dentro de la casi infinita variedad de accesorios o partes podemos hacer un breve recuento de los más comunes en la construcción convencional:
El rodapié: es un accesorio principalmente para la seguridad, evita que herramientas o piezas puedan caer a niveles inferiores, y consiste en una lámina no muy ancha enganchada en la parte inferior de los travesaños.
Travesaños: son barras de seguridad que funcionan como barandillas que se instalan rodeando las plataformas, para incrementar la seguridad de los trabajadores.
Plataformas: es una tabla o plancha lo suficientemente resistente que se utiliza para crear superficies planas donde los trabajadores se puedan desplazar. Normalmente son perforadas para evitar el acumulamiento de agua y aumentar el efecto antideslizante.
Escaleras: son escaleras portátiles muy ligeras que permiten subir o bajar de nivel en los andamios, también son muy fáciles de montar y desmontar para agilizar el desplazamiento de los trabajadores.
Cuello: Son piezas ubicadas en los nodos de unión, de forma circular con radios donde, a través de una cuña de metal, se aseguran los elementos horizontales a los verticales.
Placa base: se trata de una plancha de acero soldada a un tubo cilíndrico donde se apoya todo el sistema de andamiaje, es la que permite asentar y nivelar todo el andamio respecto al suelo.
Ruedas: es un accesorio muy popular en andamios de baja altura, se colocan en lugar de la placa base, para convertir el andamio en un elemento móvil. Las ruedas deben contar con un freno y con un buen nivel de adherencia, ya que de lo contrario, pueden convertirse en un riesgo para la seguridad.
Más allá de que es poco probable conseguir una obra sin andamios hoy en día, si como profesionales nos tomamos el tiempo de hacer una inversión, y se usa en todas las partes de un andamio correctamente, se puede llegar a agilizar y hacer mucho más eficiente el trabajo, llegando a obtener importantes ahorros económicos durante el desarrollo de la obra.
Sin considerar, que la seguridad en la obra aumentará considerablemente, asegurando el bienestar y el correcto desarrollo de los trabajos en la obra, llegando incluso a mejorar la calidad.
Claves, retos y tendencias actuales en análisis y cálculo de estructuras, explicados por una experta del sector en esta entrevista.
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